Happy birthday, my sister

Y volvía a estar allí. En el mismo escalón de la misma calle de camelias transparentes colgadas de la pared. La misma ventana de bordes azules por la que asomabamos la cabeza años atrás para ver cantar a los pájaros de buena mañana. La misma gente, los mismos bares, el mismo parisaje...todo parecía igual. Todo parecía volver a ser como antes.
Hasta que te ví, y me vistes. Y ni tu ni yo éramos las mismas, y viendolo mejor, nada era lo mismo. El aire rozaba tu pelo más corto que nunca, y la lluvia oscurecía el mío, vivo como tus ojos.
Cubierta por un elegante vestido de sonrisas y peinada con adornos de alegría desbordante me volvistes a abrazar. Y con tu calor me transmitistes otra vez aquella incerteza. Aquella que me susurra al corazón que aproveche cada nanosegundo que estoy contigo, porque nunca se sabe cuando va a ser la próxima vez, si es que la hay.
El fuego que hay en ti me abruma y me asusta, hasta el punto de pensar que quizá algun dia ya ni me recuerdes. Aunque en el fondo se que habitaré por mucho tiempo en la parte ligeramente pequeña de inocencia que todos guardamos, que tu guardas. Pues cada vez que nos vemos, desbordamos ambas por las manos olas de complicidad fuerte, de la que no entiende ni de espacio, ni de tiempo, ni de nada más, que de ti y de mi.

Felicidades un año más...9.