Navengando por la extrema suavidad de tu piel.
Un reluciente y deslumbrante brillo que nace de mis ojos,
al verte tendida con esa dulce sonrisa,
con esa abrumadora mirada,
dejando paso a un sinfin de sentimientos,
envueltos entre càlidos silencios,
que se pierden entre las arrugas de las sábanas.
Y hasta la mágica noche, o el tardío amanecer nos acogen,
nos acunan sin más.La luna susurra a nuestros oídos,
nos invita a echarnos sobre su pálido torso.
Un insaciable deseo recorre hasta mi alma,
unas infinitas ganas de decirte que te quiero en cada gesto.
Que no hay nada que más anhele,
que recostarme sobre tu hombro en cada despertar,
al tiempo que me tiendes tu mano,
y me enseñas a soñar en esta realidad.
Cerremos los ojos..y dejémonos llevar por este encanto...
...sublime...